¿PORQUÉ TANTO SUFRIMIENTO?

Hoy en mi tiempo a solas con Dios venía a mi mente lo poco que entendemos a Dios, y lo mucho que nos quejamos, lo poco que agradecemos por tanto como Él nos da y nos bendice y lo mucho que estamos mirando nuestro propio ombligo pendientes del más mínimo dolor y problema...Cuando todo nos va bien... a menudo perdemos el interés y la urgencia por orar y buscar a Dios, nos distraemos fácilmente con todo el abanico de ofertas que el mundo pone a nuestros pies..., pero cuando nos va mal... la queja brota de nuestros labios rápidamente... y el consabido... ¿porqué?

 

Y es que Dios nos ama tanto... que nos golpea, sí... parece una contradicción ¿verdad? pero no lo es..., o ¿Acaso cuando corregimos a nuestros hijos por algo en lo que han desobedecido, por rebeldía y a pesar de haber sido advertidos de las consecuencias... no los estamos amando? porque si no nos importaran... no nos molestaríamos en corregirles, ¿cierto? la corrección es un acto de amor, de preocupación por su formación, de deseo de que sean "hombres y mujeres de bien" cuando crezcan...

 

Como dice la Palabra de Dios en Proverbios 20:30, los golpes y las llagas "drenan el mal"... ¿qué significa eso? según el diccionario, drenar es: "Eliminar las aguas superfluas o perjudiciales de un terreno".Nosotros tenemos "aguas perjudiciales" en nuestro interior: maldad, soberbia, rebeldía, egoísmo, mezquindad, murmuración, obstinación, vanidad... etc., porque sólo hay UNO BUENO: DIOS, y necesitamos drenar de nuestro interior ésas "aguas sucias", por ello Dios permite sufrimientos... para que nos demos cuenta de cómo reaccionamos ante ellos, nos examinemos y descubramos "aguas sucias" que hay que drenar fuera, y las cambiemos por el "Agua Viva y Pura" que Dios nos da.

 

Pero el sufrimiento no sólo nos limpia de maldad si lo vivimos con Dios, también nos madura, y nos enseña a obedecerle, llevándonos a una comunión más íntima con Dios, a un conocimiento más profundo de cómo es Cristo, y a que poco a poco, El Señor sea formado en nosotros... si colaboramos con Él y nos dejamos.

 

Durante toda mi vida he experimentado grandes sufrimientos y mucho dolor, y aún sigo padeciendo, pero si me sacudo de la auto compasión en la que tan fácilmente caemos y miro arriba, puedo darme cuenta de los cambios que Dios ha obrado en mi carácter, en mi vida, en mi interior y en mi exterior... y ¡¡lo que me queda aún!!  

 

A veces porque nos despistamos y Dios nos hace ver que hay cosas que no controlamos y le necesitamos muchísimo, otras porque quiere tratar con nosotros y "drenar aguas sucias", muchas veces para enseñarnos a ser obedientes, y siempre... siempre... buscando formar a Cristo en nosotr@s, y que la gente que nos rodea le vean a Él... y no tanto a nosotr@s.

 

¿Estás sufriendo? ¡TE ENTIENDO BIEN!... sé lo duro que puede ser, lo desesperante, y cuantas veces no entendemos a Dios, y hasta nos enfadamos con Él, pero... necesitamos entender que a Dios le interesa más nuestra Eternidad plenamente Feliz, que un corto tiempo lleno de aflicciones... como Pablo decía:

 

"Porque todas las cosas son para vuestro bien, para que abundando la gracia por medio de muchos, la acción de gracias sobreabunde para la gloria de Dios. Por tanto, no desmayamos; más bien, aunque nuestro hombre exterior se va desgastando, el interior, no obstante, es renovado de día en día. Porque esta leve tribulación momentánea, produce en nosotros un cada vez más excelente y eterno peso de gloria; no poniendo nuestra mira en las cosas que se ven, sino en las que no se ven; porque las que se ven son temporales, pero las que no se ven son Eternas".(2 Corintios 4:15-18)

 

¡Ja!  Pablo habla en éste texto de  "leve tribulación momentánea"... pero en este otro texto nos detalla un poco mas cuan "leve" fue su tribulación... sólo una pincelada:

 

"¿Son hebreos? Yo también. ¿Son israelitas? Yo también. ¿Son descendencia de Abraham? Yo también. ¿Son ministros del Mesías? (Hablo como si hubiera perdido el juicio.) Yo más: en trabajos, mucho más; en cárceles, mucho más; en azotes, más severamente; en peligros de muerte, muchas veces. De los judíos, cinco veces recibí cuarenta azotes menos uno. Tres veces fui azotado con vara; una vez apedreado; tres veces fui náufrago; una noche y un día he estado en lo profundo; en viajes, frecuentemente; en peligros de ríos, en peligros de ladrones, en peligros de los de mi nación, en peligros de gentiles, peligros en la ciudad, peligros en el desierto, peligros en el mar, peligros entre falsos hermanos;  en trabajos y fatiga; en noches en vela, muchas veces; en hambre y sed; en ayunos, repetidamente; en frío y desnudez.  Aparte de las cosas externas, lo que sobre mí se agolpa cada día: la solicitud de todas las iglesias. ¿Quién enferma, y yo no enfermo? ¿Quién es inducido a pecar, y yo no me quemo de angustia?  Si es propio gloriarse, me gloriaré en las cosas de mi debilidad.  El Dios y Padre de Jesús el Mesías, quien es por siempre bendito, sabe que no miento.  En Damasco, el gobernador del rey Aretas vigilaba la ciudad de los damascenos para prenderme,  y fui descolgado en un canasto desde una ventana del muro, y escapé de sus manos". (2ª Corintios 11:22-33)

 

 

¿Hemos pasado nosotros por éso por causa del Señor?... ¡Ni mucho menos!, y sin embargo para nosotros no es "leve tribulación momentánea"... y es que quizá no valoramos tanto la Eternidad como deberíamos, miramos demasiado el "hoy"... y no estamos tan enfocados como deberíamos en "la Eternidad Gloriosa" que nos aguarda si somos fieles y perseveramos... pase lo que pase...

 

MEDITEMOS EN ÉSTE TEXTO:

 

"Así también EL MESÍAS no se glorificó a sí mismo haciéndose Sumo Sacerdote, sino el que le dijo: Mi Hijo eres Tú, Yo te he engendrado hoy.  Como también dice en otro lugar: Tú eres sacerdote para siempre, Según el orden de Melquisedec.  Quien en los días de su carne, habiendo ofrecido ruegos y súplicas con gran clamor y lágrimas al que podía rescatarlo de la muerte, FUE OÍDO A CAUSA DE SU SUMISIÓN. 

 

 Y AUNQUE ERA HIJO, por lo que PADECIÓ APRENDIÓ OBEDIENCIA,  y habiendo sido perfeccionado, vino a ser Autor de Eterna Salvación para todos los que LE OBEDECEN;  y fue proclamado por Dios Sumo Sacerdote según el orden de Melquisedec". (Hebreos 5:5-10)

 

 

Si Jesús... siendo DIOS ENCARNADO, tuvo que padecer en su parte humana para aprender obediencia... ¡¡CUÁNTO MÁS NOSOTROS NECESITAMOS PADECER PARA APRENDERLA!!, pero igual que estuvo Dios con Él para sostenerle y fortalecerle a fin de poder soportar... estará con nosotros si somos obedientes y nos sometemos a su trato, porque Dios no permitirá jamás más sufrimiento del que podemos soportar... y siempre nos dará una salida...

 

" No os ha sobrevenido ninguna prueba que no sea humana, pero fiel es Dios, quien no os dejará ser probados más de lo que podéis; antes bien, juntamente con la prueba proveerá también la salida, para que podáis soportar". (1 Corintios 10:13)

 

" Considerad pues al que soportó tal contradicción de pecadores contra sí mismo, para que vuestro ánimo no se canse y desfallezca, pues todavía no habéis resistido hasta derramar sangre combatiendo contra el pecado; y habéis olvidado la exhortación que como a hijos se os habla, diciendo: Hijo mío, no tengas en poco la disciplina del Señor, NI DESMAYES cuando seas reprendido por Él. Porque el Señor AL QUE AMA DISCIPLINA, Y azota a todo el que recibe por hijo.

 

Permaneced bajo la disciplina, pues DIOS OS ESTÁ TRATANDO COMO A HIJOS; porque, ¿qué hijo es aquel a quien su padre no disciplina? Pero si quedáis sin disciplina, de la cual todos han llegado a ser partícipes, entonces sois bastardos y no hijos. Además, nosotros hemos tenido a nuestros padres naturales, los cuales nos castigaban, y los respetábamos.

¿NO NOS HEMOS DE SOMETER CON MUCHA MÁS RAZÓN AL PADRE DE LOS ESPÍRITUS Y VIVIR? Porque ellos en verdad nos castigaron por pocos días, según les parecía, pero Éste, PARA LO PROVECHOSO, a fin de que participemos de Su Santidad.

 

Es verdad que ninguna disciplina al presente parece ser causa de gozo, sino de tristeza; pero más tarde da FRUTO apacible de justicia a los que por ella han sido ejercitados. Por tanto, FORTALECED las manos debilitadas y las rodillas paralizadas, y HACED SENDAS DERECHAS para vuestros pies, para que no se disloque lo cojo, sino más bien que SEA SANADO.Seguid la PAZ con todos, y la SANTIDAD, sin la cual nadie verá al Señor..."     

(Hebreos 12:3-14)

 

 

Así pues... tengamos ánimo y recordemos que aún en medio de nuestro sufrimiento DIOS SIEMPRE ES DIGNO DE SER ALABADO,aunque lo hagamos llorando, ADOREMOS AL SEÑOR, y agradézcámosle por tratar con nuestras vidas, aunque no entendamos, entreguémosle nuestro dolor, nuestra situación temporal, nuestros problemas... y digámosle:

 

¡¡PADRE... HAZ EN MÍ TU VOLUNTAD, FORTALÉCEME Y AFÍRMAME EN TI, AYÚDAME A SOPORTAR LO QUE TÚ PERMITAS EN MI VIDA, HAZME AGRADECID@ POR QUE ME TRATAS COMO A HIJ@ Y TODO LO QUE PERMITES ES PARA MI BIEN, DAME VALOR PARA ENFRENTAR LAS PRUEBAS, Y PERDÓNAME POR QUEJARME A VECES, TE AMO SEÑOR, POR FAVOR, CONCÉDEME QUE MI VIDA TE GLORIFIQUE SÓLO A TI... EN EL NOMBRE DE JESUCRISTO, AMÉN!!.

 

 

¿SUFRES?..... ¡¡NO DESMAYES... ES PARA BIEN... PORQUE... DIOS TE AMA!!   

 

Gely Verjuan